Estamos estos días en Galicia asimilando los resultados de una encuesta que nos cuenta que, por primera vez en siglos (literalmente), el gallego no es la lengua más hablada en Galicia. Desde luego, da para mucha reflexión. Y, en mi opinión, el error más simple -y más nuestro, quizá- sería echar la culpa a los políticos. Pero me gustaría indicar algunos factores que creo que influyen en esta situación, junto con algunos hechos constatables.
- Los recursos audiovisuales que recibimos no están en gallego, sino en castellano (cada vez menos) y en inglés (cada vez más).
- Se premia el uso del gallego con subvenciones.
- Se habla menos gallego que cuando estaba limitado su uso.
- Se utiliza el gallego como única lengua de comunicación en muchos entornos (pienso en colegios), sin ser la lengua en la que esas personas hablarían si no tuvieran esa limitación.
- Se asocia el gallego a sectores muy relacionados con la tradición gallega (pienso en entornos relacionados con el folklore).
- La lengua se trata como un fin, no como un medio; se habla gallego por el hecho de hablar gallego (para que no se pierda, para que se siga usando, etc)
Desde luego, como decía, da para mucha reflexión, pero cada uno de estos puntos influye -en mi opinión- en la noticia que nos ocupa.