El entorno de Fuente Dé es un lugar obligado, en especial para los amantes de la naturaleza, de la montaña y de las rutas por ella.
El teleférico es a la vez transporte y atracción. En cuatro minutos nos sube a la estación superior, desde la que parten varias rutas de gran interés.
Hemos tenido la fortuna de disfrutar del teleférico en varias ocasiones. Y quiero destacar la que quizá parecería menos atractiva: una subida en una jornada de espesa niebla, que hizo que la montaña se presentara ante nosotros de repente, grandiosa y admirable. Qué locura.
Para Dani.