En el norte de la provincia de León (España), y prácticamente tocando la Cordillera Cantábrica se encuentra el pueblo de Valporquero de Torío, en donde, desde 1966, se puede visitar una cueva asombrosa, y que no puedo más que recomendaros encarecidamente.
En la versión más básica de la visita se ofrecen dos recorridos: el corto y el largo. Os recomiendo el largo, ya que se puede disfrutar de toda la parte visitable de la cueva. Quizá, si lleváis niños, tengáis que llevarlos en brazos (por cansancio, no por dificultad) en alguna parte del recorrido.
Tuvimos la suerte de vivir un momento único en esa cueva: el guía -tras pedirnos permiso- apagó las luces para que pudiéramos disfrutar de la oscuridad más absoluta. Desde luego, una oscuridad que nunca habíamos sentido.
Adicionalmente a los recorridos básicos, se ofrece un recorrido llamado “Valporquero insólito”, más cercano a la espeleología, y un recorrido “Curso de aguas”, ya más avanzado, con barranquismo. Estoy seguro de que también muy recomendables, aunque no hemos podido disfrutarlos.