Hoy os presento -a quienes no la conozcáis- esta bellísima joya de Amancio Prada, creada en los años setenta del pasado siglo, pero que hunde sus raíces y participa del intenso erotismo del Cántico Espiritual y del Cantar de los Cantares.
Yo tiritaba de frío
mojado por todas las lluvias
de todos los niños pobres,
de todos los mendigos.
Y tú, volcán de miel.Yo que estaba solo al fin,
en medio de tanta gente,
buscándote, buscándote.
Y tú, como un bosque lleno de pájaros.Llévame oculto en tu pelo,
llévame en tu cabello,
llévame junto a tus senos,
llévame.Repósame en tus colinas amorosas,
llámame a tu fuente
donde el placer es húmedo
y corre, gacela blanca.Tú que conoces mi cuerpo
por todos los caminos dulces
trazados con tus dedos
y con tu boca.Lumbre de mis ojos,
cansados de luchar con la niebla,
heridos mis pies de tanto caer,
de tanto caer.
Comeré sonrisas de tu árbol.
Y como Amancio Prada es música que brota de la poesía, o poesía que brota de la música, os dejo aquí también este vídeo.
Como curiosidad final, os comentaré que la canción de amor número 1 existe… pero deben conocerla muy pocas personas. 🙂