Estamos en París, en la iglesia más antigua de la ciudad. La abadía a la que perteneció -ya no existe- se fundó en el siglo VI, hace casi 1.500 años. Casi nada. Durante su primer siglo albergó los cuerpos de reyes merovingios (Childelberto, Chilperico I, Clotario II), siendo la primera necrópolis real de Francia.
La abadía dio nombre al barrio de París en el que se asentaba (y el nombre se mantiene hasta hoy). Además de albergar en su momento los cuerpos de los reyes mencionados (ahora ya no se conservan), también el cuerpo del filósofo y matemático René Descartes se encuentra allí.
Desde el punto de vista artístico y arquitectónico, prerrománico (merovingio), románico y gótico son los estilos que han conformado este lugar que, desde hace milenio y medio, ha servido para que los parisinos eleven sus súplicas a los cielos.
Por Dani y por todos sus compañeros 😉
