Se cree que puede tratarse del olivo vivo más antiguo. Aunque no se puede datar con precisión, sí se considera que puede tener entre 2.000 y 4.000 años (no es poco margen, desde luego).
Da auténtico vértigo imaginar toda la historia que ha vivido ese árbol, incluso en el caso de que su edad sea “solamente” de dos milenios.
Como curiosidad, debemos decir que algunas ramas de este árbol fueron utilizadas para hacer coronas para los atletas de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y Pekín 2008.
Cuando visitéis esa preciosa isla griega, tan llena de historia, mitología y leyenda, recordad este olivo, testigo de todo ello n