Cuenta este estilo arquitectónico con un raro privilegio: vive en las retinas y en las memorias desde que lo conocemos en los libros de texto y permanece como un deseo incumplido durante décadas. Conmigo así fue, y no soy yo el único caso que conozco.
Así que, cuando por fin estamos ante esas joyas, retrocedemos, primero, décadas hasta los libros de texto; después, siglos hasta la construcción de estos edificios.
Hoy os traigo esta preciosa lámina en donde nos indican las ubicaciones del prerrománico asturiano. También fuera de Asturias -aunque es más extraño- hay prerrománico.