El Camino de Santiago es la vía por la que la cultura europea entró en la península ibérica; un símbolo de lo que ha sido y quiere ser este viejo continente, esa Vieja Europa a la que se dirigió el papa Juan Pablo II al comienzo de la década de los ochenta.
El arte gótico nos llegó por ese camino. Aquí teníamos nuestro maravilloso románico, pero aquellas construcciones góticas que casi tocaban el cielo supusieron una revolución.
Y quiero destacar (no soy original con esto) dos absolutas maravillas: la catedral de Burgos y -pongámonos de pie para hablar de ella- la catedral de León. Por favor, no dejéis de visitarlas.