Mi madre siempre me dice que las personas podemos ser sacos de melones o sacos de harina. Y que hay que procurar ser siempre sacos de melones.
El saco de melones hace mucho ruido al vaciarse, pero una vez se ha vaciado no queda nada dentro. En cambio, el saco de harina es muy suave y silencioso en su vaciado. Pero siempre queda harina adherida a la tela del saco.
Procuremos ser sacos de melones.
Te quiero, mamá. Gracias por esta y por otras muchas lecciones.