Esta palabra proviene, posiblemente, del dialecto árabe que se hablaba en la Península Ibérica, de la palabra farfál o farfár. A su vez, esta proviene del árabe clásico: farfara, que significa romper o desgarrar.
Debo decir que no veo mucha relación -eso no significa que no exista- entre el significado actual de fanfarrón (el que se precia de lo que no es) y el descrito de la palabra de la que proviene. Pero, como sabéis, los caminos que recorren las palabras a lo largo de siglos y generaciones no siempre son rectos.