Se llaman firuletes (“adornos”) ortográficos a esos símbolos o trazos que acompañan a algunas letras, aportando matices que nos ayudan -como mínimo- a pronunciarlas correctamente: “á” frente a “a”, “ñ” frente a “n” o “ü” frente a “u” son algunos ejemplos.
Pues bien, existe una palabra que nos ofrece una colección de firuletes (desconozco si es el récord) excepcional. Mirad, mirad:
¿Se os ocurre alguna palabra que la supere?