Conocer de cerca el maravilloso trabajo de Luz Beloso con sus alumnos de Arte me ha llevado a la conclusión de que las ciencias necesitan -necesitamos- aprender mucho de cómo se enseña el Arte. En concreto, necesitamos adoptar de inmediato las siguientes virtudes:
- Perder el miedo: ser capaces de proponer, sugerir o incluso llevar a la práctica ideas que puedan resultar absurdas a terceras personas. Olvidemos ese miedo.
- Salirse del camino marcado: no salirse nunca del camino nos garantiza no encontrar nunca nuevos caminos. Es necesario salirse (en general, con sentido y argumentos) para poder mejorar.
- Investigar: aquí lo tenemos claro. Todo el tiempo dedicado a investigación es tiempo bien aprovechando, aunque existan -o gracias a los- errores.
En resumen, mi felicitación y admiración por el trabajo de Luz y sus alumnos, y un toque de atención a nosotros: ingenieros (me pongo de primero para que quede claro que este toque es también para mí), biólogos, químicos, físicos, matemáticos y demás personas del mundo de la ciencia y la tecnología. Con especial atención a los profesores de esas materias: sus alumnos tienen mucho que experimentar, lo necesitamos.