Michael Robinson es una persona cuyo carácter nos la ha convertido en cercana, prácticamente de la familia, aun sin conocerla. Futbolista (Preston, Manchester City, Brighton, Liverpool, Queens Park Rangers, Osasuna).
A mí me ha llovido la suerte: tengo sesenta y un años y son sesenta y un años años amando y sintiéndome amado. Sonrisas de oreja a oreja, risas… no cabe en la vida de sesenta y un años tanta fortuna y felicidad y buena suerte que tengo yo.
Michael Robinson
Estas son sus primeras palabras en este documental de #Vamos en Movistar Plus, y son realmente un perfecto resumen de este alma agradecida.
El título del documental (Good, better, best) hace referencia a las palabras de San Jerónimo que su profesora de Primaria, Miss Baker, escribía cada mañana en la pizarra: “Good, better, best: I must never rest until my good is better and my better is the best“, toda una declaración de intenciones para seguir mejorando y no rendirse nunca. Robinson no se consideraba un jugador con grandes cualidades técnicas, pero sí con toda la voluntad de nunca rendirse y de darlo todo. Esa voluntad fue la que lo llevó a ser futbolista profesional y a cumplir los sueños de jugar en el Liverpool y en el estadio de Wembley, reservado para los grandes partidos.
Os recomiendo encarecidamente este documental que hace un recorrido por la vida de esta persona que supo ser feliz y hacer felices a sus personas más cercanas. Si ha sido un placer conocerlo simplemente a través de los medios de comunicación, no me imagino lo bonito que tiene que haber sido para su familia, amigos y compañeros.
Has sido un regalo, Michael Robinson. Todo mi cariño para los tuyos.