En Moaña, además de muchísimas cosas estupendas, tenemos un monumento que es homenaje, recuerdo y llamada de atención: una enternecedora escultura de Carmen Grandal que representa a un perro y a un gato, solos pero juntos.
Os dejo a continuación esta galería de fotos para que podáis verlo con detalle. Y espero que pronto podáis verlo en persona.