El experimento es muy sencillo:
- pídele a un niño que simule que está hablando por teléfono.
- pídele a un adulto que simule que está hablando por teléfono.
- asómbrate de la diferencia.
Se ha hecho viral un tittok en el que se lleva a cabo esto, pero podéis probarlo, sorprenderos y sorprender, vosotros mismos.