Estábamos dando un paseo y yo me paré a atarle a Dani un cordón de la zapatilla. Unos turistas -forasteiros, aquí les llamamos así- que paseaban por allí no perdieron su ocasión de intervenir: “este niño sabe atarse los cordones, que me lo dijo a mí, pero prefiere que se los ate su padre”.
Aproveché para explicarles que seguramente no me quedaba mucho tiempo más de hacer eso. Creo que se quedaron un poco decepcionados; me parece que contaban con que yo aprovecharía su ayuda para atacar a mi hijo. Lo digo completamente en serio.
Me hubiera gustado explicarles también que -si todo va bien- llegará un momento en el que sea Dani el que me ate las zapatillas a mí.
Y ahora reflexiono un poco. Sobre por qué molesta ver a un papá atar las zapatillas a su hijo. O llevarlo de caballito. O por qué molesta ver a una mamá dando el pecho a su niño (hoy ha escrito Patricia Garcés un interesante artículo relacionado). O por qué nos resulta más escandaloso ver una pareja haciendo el amor que ver a una pareja discutiendo.
Y he llegado a la conclusión de que a este mundo le molesta el amor.
Querido primo.los ” forrasterros” ya no saben ni serlo… vienen a Ejpaña y con tanta tecnologia que saben más de aquí que Tú o que yo.ahora ya no preguntan!! Exigen! Y pobre tuya como digas algo… lo único que queda claro, es q el ser humano es ” maruja” por naturaleza, independientemente de su lugar de origen. Y en cuanto a lo de ser papas, creo que nadie esta habilitado como apostol de la educacion, que un niño es como es y como lo moldeamos, y que si te da la gana de atarles los cordones hasta los 26, pues se los atas.A lo mjor a Ti te gusta hacerlo y ves en ello refuerzo o estimulo o simplemente un ” lazo” de uniòn con Miniprimo.. lo que nos faltaba era que vinieran de fuera a decirnos como vivir, educar, disfrutar, compartir o consentir si llega el caso…ellos.. que quizas su cultura es fria, carente de todo sentimiento de cariño, mimo o compasion infantil se creen con derecho a discutir, infundir dudas sobre la educacion y no saben ni quieren ver en ese gesto una complicidad padre-hijo. Mire Ushted sr forrastero.. cualquier comentario sobre el pais, comida, costumbres, toros, politica, clima es valida.. pero criticar a mi primo .. huy huy huy, por ahi no paso!!. Será lo que Usted quiera.. pero superpapá es de cojones!! Siga usted su camino, diafrute del paisaje, deje hablar a su mujer y consuma en españa.. porque el viaje, la estancia o la comida van quizas, incluidas en la reserva, pero poner en tela de juicio lo q un padre comparte con su hijo no!! Y si no le gusta.. a tomar por culo, hombre ya!!
Gracias por tus cariñosos comentarios, primo! :*